viernes, 10 de abril de 2009

Helado nazareno






En realidad era un helado de mora (o de frutas del bosque) que se estaban comiendo dos señoras en el metro.
Pero pensé: qué sabor de color más apropiado para estos días de penitencia, qué tono más a tono con estas fiestas.

Por cierto que si no pude acercarme a ellas para afinar más las fotos fue porque una de las damas se percató de que las apuntaba con el móvil y comenzó a mirarme con cara de ñu.
Le faltó bufarme, y yo entonces me corté porque no era mi intención amargarle el dulce.

No hay comentarios: