domingo, 29 de mayo de 2016

Mi X-periencia FB

Con el testimonio esta semana de Epaminondas Gumucio, guía turístico de Pripiat:

‘A estas alturas, creo que no podría vivir sin el componente folclórico de Facebook.
Es el colorante para paellas que le da color a mi muro de inicio. Me refiero a esos perfiles de amigos que postean continuamente homenajes a la Guardia Civil, a los lejías, a las fuerzas armadas y en general todo lo que lleve uniforme, porque ellos son muy amantes del orden y la autoridad.
Estoy seguro de que si se permitieran algún morbo sexual, sería el de lamer unas botas militares.
Aunque supongo que con encender la luz tienen bastante.

Son casi todos muy capillitas, con lo que la devoción al Cristo o Virgen local está asegurada.
Si además llega Semana Santa y a la imagen del Cristo o la Virgen la levantan unos legionarios, el orgasmo puede ser múltiple.
Dejan muy claro, en posts de rotación pesada, lo orgullosos que están de su bandera, acompañada a veces de un claim bastante agresivo: ‘esta es mi bandera, yo estoy muy orgulloso de ella, si tú no lo estás, pírate’.
Resultan un poco exaltados, lo sé, pero son el pimentón de mi muro de inicio.
No podría vivir sin ellos, aunque confieso que hay algo de masoquismo.
Musicalmente, por ejemplo, no tenemos nada que ver.
Sus greatest hits son la marcha real, la salve rociera, el himno de infantería y el Que Viva España de Manolo Escobar, ese gran clásico de borracheras de sangría.
Para ellos ser español es algo que hay que proclamar con orgullo a cada momento, no vaya a ser que me despiste y los tome por esquimales o la invasión de los ultracuerpos.
No conocen el término medio: si eres español y no te sientes rabiosamente español, hasta el punto de espumar por la boca, tienes un problema, y muy serio. Como de tener que seguir tratamiento médico.
Yo en el fondo les envidio. Me gustaría ser tan conformista como ellos. Ya les puede llegar la mierda al cuello, ya puede reventar el mundo que a ellos lo único que les importa y les hace felices es que la bandera rojigualda ondee bien hermosa en el balcón del ayuntamiento y no les falte la procesión de la Virgen.

En realidad son muy fans de cualquier tradición.
Digo yo que tendrá que ver conque la mayoría viva en pueblos.
Lo digo sin ningún tipo de desprecio, al contrario: en mi opinión, la España profunda luce un kitsch adorable.
Solo hay que ver las fotos de perfil de muchas de estas españolísimas mujeres, posando con un vestidito muy repollo en nochevieja o en alguna boda, comunión o bautizo, a ser posible con lazo en la cintura y tela de raso con bien de brillo. Suelen completar el conjunto pashmina o mantilla española.
Eso cuando posan solas, porque lo más habitual es que aparezcan en familia o en pareja, dando un sentido a su vida.
¿Qué más? Ah sí, la palabra ETA les produce convulsiones, su equipo de fútbol es el Real Madrid, ya vivan en Motilla del Palancar o en Illescas, y son furiosamente antipodemitas.’